.

Blog LA NUEVA UNION ....sigue aca
.
.
Nuestro sincero homenaje a los hermanos Chilenos
.
MONTE ACONCAGUA
Yo he visto, yo he visto mi monte Aconcagua.
Me dura para siempre su loca llamarada
y desde que le vimos
l a muerte no nos mata.
Manda la noche grande, suelta las mañanas,
se esconde en las nubes, bórrase, acaba...
y sigue pastoreando detrás de la nubada.
Parado está en el sueño de su cuerpo y de su alma,
ni sube ni desciende, de lo absorto no avanza;
su adoración perenne no se rinde y relaja,
pero nos pastorea con lomos y llamarada
aunque le corran cuatro metales las entrañas.
La sombra grave y dulce rueda como medalla;
ella cae a las puertas, las mesas y las caras,
los ojos hace amianto, los dorsos vuelve plata,
conforta, llama, urge, nos aúpa y abrasa,
Elías, carro ardiendo
¡Monte Aconcagua!
Cebrea los pastales, tornea las manzanas,
enmiela los racimos, enjoroba las parvas,
hace en turno de Jove,
tempestad y bonanzas cuenta y recuenta hijos
y de contar no acaba...
Le aguardan espinales a la primer jornada;
después, salvias y boldos con reveses de plata,
y a más y a más que sube el pecho
se le aclara: arrebatado Elías,
¡Elohim Aconcagua!
A veces las aldeas son de su ardor mesadas y
caen desgranándose en uvas rebanadas.
Mas nunca renegamos su pecho que nos salva,
parece sueño nuestro,
parece fábula el que tras de las nubes su rostro guarda.
¡Elohim abrasado,viejo Aconcagua!
Yo veo, yo veo, mi Padre Aconcagua
de nuestro claro arcángel desciende toda gracia.
Ya se oyen sus cascadas,
por las espumas blancas la madre mía baja y
después se va yendo por faldas y quebradas.
¡Demiurgo que nos haces,viejo Aconcagua!
Di su nombre, dilo a voces para que te ensanche el pecho
y te labre la garganta y se te baje a los sueños.
Aconcagua "padre de aguas",
Aconcagua, duro gesto,
besado del Dios eterno y del arrebol postrero.
Algo ha en tus manos,
algo que invoca por tus dos pueblos.
"Paz para los hombres, paz",
bendición para el pequeño que está naciendo,
dulzura para el que muere...
.
Gabriela Mistral
(Chilena)
.
.
.
MONTE ACONCAGUA
Yo he visto, yo he visto mi monte Aconcagua.
Me dura para siempre su loca llamarada
y desde que le vimos
l a muerte no nos mata.
Manda la noche grande, suelta las mañanas,
se esconde en las nubes, bórrase, acaba...
y sigue pastoreando detrás de la nubada.
Parado está en el sueño de su cuerpo y de su alma,
ni sube ni desciende, de lo absorto no avanza;
su adoración perenne no se rinde y relaja,
pero nos pastorea con lomos y llamarada
aunque le corran cuatro metales las entrañas.
La sombra grave y dulce rueda como medalla;
ella cae a las puertas, las mesas y las caras,
los ojos hace amianto, los dorsos vuelve plata,
conforta, llama, urge, nos aúpa y abrasa,
Elías, carro ardiendo
¡Monte Aconcagua!
Cebrea los pastales, tornea las manzanas,
enmiela los racimos, enjoroba las parvas,
hace en turno de Jove,
tempestad y bonanzas cuenta y recuenta hijos
y de contar no acaba...
Le aguardan espinales a la primer jornada;
después, salvias y boldos con reveses de plata,
y a más y a más que sube el pecho
se le aclara: arrebatado Elías,
¡Elohim Aconcagua!
A veces las aldeas son de su ardor mesadas y
caen desgranándose en uvas rebanadas.
Mas nunca renegamos su pecho que nos salva,
parece sueño nuestro,
parece fábula el que tras de las nubes su rostro guarda.
¡Elohim abrasado,viejo Aconcagua!
Yo veo, yo veo, mi Padre Aconcagua
de nuestro claro arcángel desciende toda gracia.
Ya se oyen sus cascadas,
por las espumas blancas la madre mía baja y
después se va yendo por faldas y quebradas.
¡Demiurgo que nos haces,viejo Aconcagua!
Di su nombre, dilo a voces para que te ensanche el pecho
y te labre la garganta y se te baje a los sueños.
Aconcagua "padre de aguas",
Aconcagua, duro gesto,
besado del Dios eterno y del arrebol postrero.
Algo ha en tus manos,
algo que invoca por tus dos pueblos.
"Paz para los hombres, paz",
bendición para el pequeño que está naciendo,
dulzura para el que muere...
.
Gabriela Mistral
(Chilena)
.
.