Cuenta la leyenda, que una vez, una serpiente empezó a perseguir a una Luciérnaga; ésta huía rápido y con miedo de la feroz depredadora, pero la serpiente no pensaba desistir.
Huyó un día y ella no desistía, dos días y nada.
En el tercer día, ya sin fuerzas, la Luciérnaga paró y dijo a la serpiente:-
Puedo hacerte tres preguntas?-
No acostumbro dar éste precedente a nadie pero como te voy a devorar, puedes preguntar.- ¿Pertenezco a tu cadena alimenticia?
- No.
- ¿Yo te hice algún mal?
- No.
- Entonces, ¿Porque quieres acabar conmigo?
- Porque no soporto verte brillar.
.
Piensa en esto, selecciona las personas en quien confiar.
Muchas veces nos hemos visto envueltos en situaciones donde nos preguntamos:
¿Por qué me pasa esto si yo no hice nada malo?
La respuesta es sencilla, porque no soportan verte brillar.
La envidia, es el peor sentimiento que podemos tener.
Envidiar a otras personas, sus logros, es en definitiva envidiar, ver a otros brillar.
Cuando esto nos pase, NO DEJEMOS DE BRILLAR, no dejemos de seguir siendo nosotros, de seguir haciendo lo mejor que sepamos hacer. De todas maneras, aunque nos hieran, no podrán tocarnos, porque nuestra luz seguirá intacta, nuestra esencia permanecerá, pase lo que pase!!
(recibido por correo)
.
.
Que pesado a de ser para el envidioso vivir...cargando continuamente con el ser a quien envidia.
Que pesado a de ser para el envidioso vivir...cargando continuamente con el ser a quien envidia.
Decía Ingenieros :..."El que envidia se rebaja sin saberlo, se confiesa subalterno; esta pasión es el estigma psicológico de una humillante inferioridad, sentida, reconocida"...
Abu
no me gustaria nunca estar en la piel del envidioso...
ResponderEliminarbesos abu
Decimos por aquí que si los envidiosos volaran, no se vería el sol. Hay muchos y se esconden a veces en el anonimato para atacar como serpientes depredadoras y maltratar a quien nada les hizo. Yo también sé algo de eso. Pero también se dice que ladran luego cabalgamos.
ResponderEliminarGracias amiga por tus visitas siempre bien recibidas.
Que bonito escrito Abu, es verdad lo del cuento este, la envidia es terrible para el envidioso y para el envidiado, en Spain decían siempre que la envidia es el pecado nacional., será verdad ?
ResponderEliminarEs verdad ,la envidia es como un mal que corroe por dentro..El envidioso puede dejar de serlo ?Siempre me lo pregunto...Besos
ResponderEliminarAbu, sabes cuánto me gusta visitarte y leer los buenos textos que colocas.
ResponderEliminarSí, Abu, que triste debe ser estar en la "piel" del envidioso.
ResponderEliminarEs un sentimiento que gracias a Dios no se me desarrolló nunca.
Me alegra que a la gente que se lo merece le vaya bien y si lo que tiene es con esfuerzo y no robándole al prójimo, me encanta.
Pero bueno, no todos sentimos de la misma manera.
Besos "sinceros"..
Las cosas no son siempre lo que parecen... el herido es el vencedor. un abrazo. alicia
ResponderEliminarQué hermossooorrr!!
ResponderEliminarMe encantó Abue!!
Un besote!!
Hola Abu, yo recuerdo una frase de cuando era niña: "si la envidia fuera tiña todos calvos". no creo que sea para tanto pero sí por desgracia es uno de los sentimientos humanos "mas humanos"...
ResponderEliminarUn abrazo
Muy bonito el texto y el comentario, para meditarlo. Un abrazo
ResponderEliminarLa envidia es la semilla de muchos males. Por algo será que le dicen Pecado Capital.
ResponderEliminarqué feo sentir así! y cuánto mal hace a los demás y al envidioso también.
un beso,
Verónica
;)
Uhhh, ABu... que mochila tan pesada debe cargar el envidioso!!!!
ResponderEliminarBesos Abu
Y sin embargo, a pesar de ser perseguidos, ¡qué importante es que los seres de luz nos sigan iluminando!...
ResponderEliminarGracias por tu visita, Abu. Me pillaste preparando el nuevo post que acabo de colgar
Un beso
ABUELA CYBER, qué bonita parábola... cuánto cuesta a algunos aceptar y valorar a alguien que brilla más que ellos. Por cierto, gracias por tus comentarios en mi blog. Besotes, M.
ResponderEliminarsi mi mama me mando ese cuento hace unos años..es hermoso besote grande!!!!!
ResponderEliminarla envidia es un pecado grave. Y sólo sirve para ser infeliz. un beso.
ResponderEliminarBellisimo relato, realmente inspirador.
ResponderEliminarUn abrazo desde un rincón de Ica, mi tierra amada.
Te invito a mi blog, donde eres y serás siempre bienvenida.
He llegado hasta aquí saltando de blog en blog y me he parado un rato...Y me gustaria decirte que he pasado unos instantes gozosos con esta historia tuya que me ha hecho pensar en alguna serpiente que ronda cerca de mí y , lo que es más importante, me ha hecho pensar en mí y en la actitud que debería tener ante ella.
ResponderEliminarUn saludo desde el País Vasco
Querida Abu,la envidia es producto de la ignorancia, si lo vemos de esta manera lo único que podemos sentir por esas personas es pena.
ResponderEliminarporque seguramente sufren por ser así y no saben como revertir la situación.
Fijate que todo lo que deseamos nos vuelve a nosotros en mayor intensidad, es la ley de causa y efecto.
Besitos, amiga!!
Queridos amigos, es grato verlos por acá y que dejen sus sentires y que los mismos los vinculen entre si.
ResponderEliminarEs logico que tengamos formas a veces ditintas de expresar tal vez el mismo sentir.
Cada uno lo vivi a su manera, pero todos estamos de acuerdo que es negativo sentires tan perjudiciales como la envidia.
Eso s no creo que sera de personas con poca cultura o medios de vida, no la envidia le cae a todos los seres sin importar el contenido del mismo.
Lo veo como una enfermedad, que si bien es un sentimiento, al profundizarse se plasma fisicamente, una insatisfaccion permanente.
Gracias por siempre estar.
Cariños.
Claro que es muy perjudicial, pero a veces, tan difícil de erradicar! Mil besos
ResponderEliminarAbu, yo creo que la envidia no solo es mala en si misma sino que empuja a realizar cosas que, incluso, dañan al propio envidioso cuando trata de alcanzar, sin poder, lo que tiene el envidiado.
ResponderEliminarBesos y gracias por tus preciosos escritos, son todo una buena leccion.
¡Ay la envida! Ese mal universal.
ResponderEliminarMuy cierto lo que dices, la envidia es mala para quien la padece pero, no me dan pena porque cada uno debemos conformarnos con lo que tenemos y sacarle el máximo provecho.Un abrazo desde España y que tengas una féliz semana.Como siempre un relato bello.Bs,Angela
ResponderEliminar